viernes, 12 de agosto de 2011

Relaciones sociales, perspectiva arqueológica

En el estudio de las relaciones sociales confluyen una serie de ciencias sociales, la sociología, la psicología general, la psicología social y la psicología ambiental, también la antropología, la comunicación y la lingüística, así como la arqueología. Todo ello debido a que las relaciones sociales es un fenómeno complejo que requiere para un estudio serio y profundo de la participación de todas estas ciencias sociales, y algunas más según el asunto que nos ocupe (derecho, economía, etc.) Lo que en este momento nos interesa resaltar es la triada conformada por sociología, psicología ambiental y arqueología (contemporánea o del presente), debido a que toda relación social, además de requerir de varios seres humanos relacionandose entre sí, también necesita de una serie de elementos materiales que facilitan y apoyan, o dificultan y obstaculizan una relación social. Elementos frente a los cuales, los seres humanos reaccionan en el plano psicosocial. Esto es, la gente asume ciertas actitudes, se comporta de "x" o "y" manera, y utiliza los objetos con determinados fines y a partir de motivaciones implicitas o explicitas. Así que en las relaciones sociales, el uso de los objetos, el "que", el "cómo" y el "para qué" no es algo irrelevante. Desafortunadamente es un conjunto de temas a los que no se les ha prestado mucha atención. Desde una perspectiva arqueológica, el estudio de las cosas, de los objetos construídos por el propio hombre, nos puede dar muchas luces sobre el cómo eran y son las relaciones humanas cotidianas, y de cómo esos objetos adquieren valor y significado para los seres humanos que se relacionan, al condicionar de alguna manera esas relaciones.