domingo, 6 de junio de 2010

Ingeniería social y psicoanálisis

El pasado viernes, tuve la oportunidada de asistir a la conferencia sobre psicoanálisis y pedagogía que dictó la Dra. Ana Ruth Najles, psicoanalista lacaniana argentina, en la UNAM. En su exposición, la Dra Najles definió el psicoanalisis lacaniano y lo diferencióa de otras escuelas de psicoterapia. Ella dijo que la finalidad del psicoanálisis era lograr que el individuo se liberará de sus fantasmas, para poder ser más plenamente el mismo, en tanto que las demás psicoterapias lo que buscaban era integrar y adaptar al individuo a la sociedad. En este segundo caso, aunque la Dra. Najles no lo manifestó explicitamente, queda la impresión de que la idea de fondo de eas psicoterapias es que el individuo está mal y la sociedad está bien, y que lo que hay que hacer es ayudar a la persona a que se adapte. El problema de un enfoque así es que parte de una idea bastante fanasiosa e inocente de que la sociedad es perfecta y buena, olvidando la serie de conflictos que de todo tipo que subyacen en ella. Si esto último es verdad, entonces en verdad que la psicoterapia no sólo no ayudará al cliente, sino que lo sumirá en mayores conflictos, porque los conceptos de salud, normalidad y deber ser, quedan asentados en arenas movedizas, sin algo que les de sustento firme y seguro. La distinción que hizo la Dra Najles resulta entonces muy relevante para el trabajo no sólo de terapia individual sino también en los casos de tepapia grupal y de intervención comunitaria. Sigueindo la postura de la Dra. Nejles, desde una perspectiva psicosocial y de ingeniería social, como la que hemos venido exponiendo en los trabajos de este blog, hay que pensar que si el psicanálisis tiene por fin hacer consciente los fantasmas que a un inididuo o coelectividad pueden tener, que les impiden un desarrollo armónico y un crecimiento, para luego liberarse de ellos, está en el camino correcto. Pretender que una comunidad o grupo se adapte a los canones de la sociedad, renunciando a sus propias características,valores y principios puede ser un suicidio. De ahí entonces, que un psicoanálisis aplicado a cuestiones de ingeniería social, debe buscar ayudar la búsqueda de soluciones a la problemática de un grupo u organización, partiendo de la base de la eliminación de los fantasmas y reafirmando la idenidad propia de esa colectividad. De tal forma que a final del proceso terapéutico y/o de los proyectos de intervención social, la comunidad consciente de sí misma, de su identidad, de sus características, sea capaz de relacionarse positivamente con el resto de la sociedad. No a partir de su adecuación y sumisión al ente social, sino desde una actitud consciente, pensante, libre, responsable y propositiva.