domingo, 17 de febrero de 2013

Acción social, estructura social y circunstancias

Hemos dicho que la acción social depende de dos elementos, la necesidad del actor y la intencionalidad del mismo considerando que su acción afectará necesariamente, de alguna forma a otros actores (individuos, colectividades, organizaciones) de los cuales se espea una reacción determinada. Pero no basta eso para poder explicarse la acción de un actor determinado, sino que es necesario que se actor, además de tratar de satisfacer una necesidad de cualquier tipo, lo haga en el marco de la sociedad y de una situación determinada. Eso nos lleva a la necesidad de considerar en el esquema explicativo sistémico funcional, la estructura social, o más bien dicho, el lugar del actor en dicha estructura. Estructura que está altamente estratificada y que supone millones de posiciones (estátus) que conforman clase sociales, subclases, estratos o estamentos. Desde esas posiciones, es que el actor actúa y lleva a cabo deterrminadas acciones. Acciones que se canalizan a través de derrminados roles (papeles) sociales. Motivo por el cual no es sostenible analizar la acción de un actor en el vacío, en el abstracto. Como tampoco es posible analizar dicha acción como un fenómeno reductible al interés particular unicamente. La pertenencia de la actor a una clase, estrato o estamento supone necesariamente cierta coincidencia entre el interés particular y el de todos aquellos que se encuentran en una posición social similar o equivalente. Como supone también la coincidencia en circunstancias de vida igualmente parecidas o equivalentes, que se imponen al actor más allá de su deseo o voluntad y a las cuales debe responder de alguna manera. Así las cosas, no nos debe extrañar que ante ciertas circunstancias del contexto social, cultural, económico y político, no uno sino miles o millones actores sociales respondan de maneras muy parecidas o incluso iguales. Si la gente sale a manifestarse a las calles, o se decide dedicar ala economía informal, o se plantea la lucha armada, es porque las circunstancias contextuales y su posición en la estructura social, no le permiten otras alternativas de acción social ya sean individuales o colectivas. Entre más bajo se enuentre localizado el actor en la estructura social, menos son sus oportunidades  y posibilidades  de acción ante las circunstancias prevalecientes.
Concluyendo, el estudio y la investigación de la acción social no puede desvincularse de la determinación de la posición social del actor en la estructura social y de su situación ante las circunstancias vigentes.

jueves, 7 de febrero de 2013

Acción social, análisis complejo

La acción social, dijo Max Weber, incluyendo las posibilidades de la tolerancia u omisión, "...se orienta por las acciones de otros, las cuales pueden ser pasadas, presentes o esperadas como futuras (venganza por previos ataques, réplica a ataques presentes, medidas de defensa frenta a ataques futuros). Los otros pueden pueden ser individualizados  y conocidos o una pluralidad de individuos indeterminados y completamente desconocidos ..." (Weber, 1984, p. 18)
Gordon Allport por su parte, definía a la psicología social  como, "un intento de entender y explicar como el pensamiento, los sentimientos y el comportamiento de los individuos son influidos por la presencia imaginaria o real de otros." (Allport, 1968, p. 3)
Cuando tratamos de evaluar la acción social de un autor, sea un individuo, una organización, debemos pues considerar que la acción no sólo está dterminada por una necesidad interna a satisfacer, sino también por una expectativa sucitada por los "otros" sea que estén presentes o no, y por las actitudes o conductas que esperamos de ellos. Muchas veces, en la vida práctica, podemos hacernos falasa expectativas sobre lo que será la respuesta de los demás a nuetras acciones; estás pueden ser bien o mal aceptadas, o pueden causar indiferencia. Y esta reacción, es uno de los primeros elementos de juicio para saber si una acción tendrá, a final de cuentas, un final exitoso o fracaso. El actor debe poder pronosticar con un buen grado de seguridad, la respuesta que obtendrá a su acción. Aunque nunca tendrá el 100% de seguridad respecto a la respueta que obtendrá. Es imposible conocer y controlar todos los elementos que entran en juego al llevara cabo una acción. Y el grado de imprevisibilidad aumenta en la medida en que o no conocemos bien a los "otros" o no son por completo desconocidos. Ese mismo grado aumenta de la misma manera si la acción social se orienta hacia un agregado de gente indeterminada y desconocida. Y si como dice Allport nos encontramos fente al la ausencia física y real de esos otros, y sólo los imaginamos y suponemos, también el grado de imprevisibilidad también aumenta. Así que el análisis de la acción social, se vuelve un asunto muy complejo desde los primeros momentos. Y la probabilidad de fracaso muy alta, aun en casos en que damos por sabido el conocimiento del o los otros sus pensamientos y motivaciones Conocer al otro se vuelve un asunto estratégico para la planeación de una acción social y para alcanzar las metas propuestas. El futbol ameicano es una magnifico ejemplo de lo hasta aquí expuesto, ya que en cada jugada y serie de las mismas, se plantea una meta a lograr y se espera una cierta reacción del equipo contrincante (a la ofensiva o a la defensiva), se plante auna jugada en términos de desconcertar al otro equipo o esperando que reaccione de tal manera que permita que la meta se alcance. Igual hace la cotraparte, tratando de imaginar la jugada que seguirá a continuación. La jugada falla si nuestra previsión es equivocada o si sucede una contingencia, una imprevisto.
Igual cosa sucede en el mundo de los negocios, la política o entre las relaciones interpersonales. Aún las relaciones de pareja pueden ser vistas y estudiadas de esta manera.
La acción social es pues una acción compleja con arreglo a fines racionales, afectivos o tradicionales, orientada por otros presentes o ausentes, reales o imaginarios y que parte de una necesidad a satisfacer.  

Allport, Gordon. cit. por:  Perlman D. y Cozby, P.C. PSICOLOGIA SOCIAL, México, Ed. Iteranericana, 1986.
Webwe, Max, EOMOMIA Y SOCIEDAD. México, Fondo de Cultura Económica, 1984.

miércoles, 6 de febrero de 2013

Tipo ideal aplicado al estudio de ideologías, filosofías y religiones

Todos en algun momento nos hemos decepcionado de una persona o grupo de ellas, cuando vemos que sus actitdes y comportamientos difieren en relación a la religión, filosofía o ideología que dicen sostener y a la que declaran se han adherido solemnemente. No es para menos.  Aun quienes nos simpatizaban y veíamos a ellos como ejemplos a seguir nos hacen pasar un mal rato, al ver esa diferencia entre lo que dicen y lo que hacen. Cuna más cuando decubrimos a los arrivistas y oportunistas que sólo se adhieren a una causa, proyecto, asociación, partido o religión con el fin de obtener una ganancia. con dlor hemos descubierto que hay una notable diferencia, un abismo entre la pureza de los ideales, principios y valores escritos en una declarción de principios, y quienes imperfectamente dicen encarnarlos. Una y otra vez este fenómeno se ha repetido a lo largo de la historia humana, en prácticamente todas las sociedades, organizaciones, grupos, iglesias, etc.
Para el sociólogo, esas diferencias son una gran oportunidad para aplicar el método del tipo ideal desarrollado por Ferdinand Tönies y más claramente por Max Weber, con el fin de comprender precisamente esa diferencia existente entre una serie de filosofías, ideologías o religiones en sus estado puro, meramente teórico y lo que realmente sucede con ellas en la realidad. Max Weber decía que, "Se obtiene un tipo ideal ... al acentuar unilateralmente uno o varios puntos de vista y encadenar una multitud de fenómenos aislados, difusos y discretos que se encuentran en gran o pequeño número y que se ordenan según lso precedentes puntos de vista elegidos unilateralmente para formar un cuadro de pensamiento homogéneo." (Weber cit. por Freund, 1986, p. 56). El investigador crea el tipo ideal con una serie de elementos que el considera pertinentes con el fin de estudiar la realidad.
Cuando se crea el citado tipo ideal no se hace sino con el fin de orientar la investigación, quedarse con lo importante y "eliminar lo despreciable" (Freund, 1986, p. 57) de tal manera que se de rigor conceptual al trabajo. También se trata de singularizar los fenómenos de la realidad. Webwee aplicó este método al estudio del capitalismo, como una manifestación singular de la vida económica, pero esto podría aplicarse al socialismo, la religión católica, las ciudades modernas, etc.
Weber distinguía dos formas de construir el tipo ideal, ya fuera mediante ala identificación de una serie de rasgos comúnes que darían por resultado un "tipo medio" o; mediante la, "...estilización que evidencie los elementos característicos distintivos o 'típicos" (Freund, 1986, p58). Ya construído el tipo ideal, se procede a comparar ese tipo ideal con la realidad existente. cabe decir que el tipo ideal presenta, "...un 'dibujo' racional, es decir, la estructura lógica independientemente  de las fluctuaciones de lo real. En resúmen, consiste en en una representación ideal y consecuente de una totalidad histórica singular, obtenida por racionalización utópica y acentuación unilateral de los rasgos característicos y originales, con el fin de dar significación coherente y rigurosa a lo que aparece como confuso y caótico en nuestra experiencia puramente existencial." (Freund, 1986, p. 59). Aplicado al asunto de las ideologías, filosofías, principios religiosos, el tipo ideal weberiano nos permite darnos cuenta que su significación no corresponde forzosamente a la idea que las personas, especialmente los militantes, se hacen de ella. Podemos obervar uan ideología poítica, una religión o una filosofía como un tipo ideal y estudiar la idea que de ella se hacen sus seguidores. Podemos, nos dice Julien Freund formar el tipo ideal  de una filosofía, "... sobre la base de los valores con los que sus promotores relaccionan la realidad social..." (Freund, 1986, p. 60).  Igual cosa podríamos hacer con una religión, ideología e incluso teoría científica. Para evitar caer en un grave error, hay que adverir que el tipo ideal no debe confundirse ni darle el status de un modelo axiológico a seguir, ni como norma práctica  a seguir; es sólo un modelo teórico que sirve como punto de comparación con la realidad. Creo que mucho nos ayudaría a comprender esa diversidad de interpretaciones, esas diferencias de sentido, el aplicar la metodología del tipo ideal de Weber en estos momentos en que conceptos como libertad y democracia se han vuelto tan vagos y difusos, cosa que también pasa con el cristianismo como relgión o el liberalismo como filosofía.

Freund, Julien. SOCIOLOGIA DE MAX WEBER. Barcelona, Ediciones Península, 1986.

sábado, 2 de febrero de 2013

Temporalidad y relatividad de la funcionalidad de los elementos de la sociedad

Los críticos de la sociología analítica, del enfoque funcional, centraron muchas de sus críticas en el planteamiento de Branislaw Malinoski, en el sentido de que toda institución social, todo elemento existentente la sociedad era funcional respecto al todo. No fue sino Robert K. Merton quien criticó fuertemente es postulado desde dentro de la propia corriente funcionalista, ya que no sólo el propio Malinowski sino otros continuadores de su línea de pensamiento, antropólogos y sociólogos, dieron por cierto ese planteamiento. Merton hizo notar que tal cosa no era verdad y que en el mejor de los casos, sólo se dría en la práctica, en grupos muy pequeños de seres humanos, o en tribus en un estado de desarrollo muy elemental. Merton abogó por un funcionalismo relativo. Y nos otros nos adherimos a tal posición debido a la idea de que la funcionalidad de un elemento no se debe relacionar con el todo social, con el conjunto de la sociedad o la cultura, sino solamente con determinados grupos o sectores, para quienes tal elementos funcional. Eso significa que lo que para ellos puede resultar funcional, puede ser para otros disfuncional o totalmente neutro. Un caso muy evidente de esta situación la encontramos en nuestro tiempo con las medidas económicas y financieras que se han recomendado y puesto en acción   por muchos gobiernos para salir de la actual crisis mundial. Medidas de austeridad y control del gasto público que han permitido a los gobiernos salir de su intrincada problemática financiera, pero que han afectado muy negativamente a los trabajadores, sus empleos, sueldos y prestaciones. Muchos de ellos sencillamente se han ido al paro laboral sin esperanzas de encontrar una nueva ocupación.
Cuando el punto de vista cambia, y ya no se mide la funcionalidad de un elemento en relación al todo, sino de un sector o grupo o clase social u organización, la perspectiva cambia radicalmente y es posible ver el conflicto interno que existe dentro de la sociedad y la cultura.  También es posible entonces dejar de ver el mundo social de manera estática, para contemplarlo de manera dinámica y cambiante, pues, "... un valor o una práctica que es funcional en un tiempo o lugar puede llegar a no serlo - interfiriendo con la operación tranquila de la sociedad - en otro tiempo y lugar." (Horton y Hunt, 2006 p. 18) Así como la sociedad y la cultura cambian, la funcionalidad de uno o varios elementos también puede cambiar y volverse un problema, generando conflicto. Sucede entonces que la visión de la sociedad como un ente en equilibrio también se viene abajo. Cuanto mucho se podría hablar de un equilibrio muy precario y dinámico, siempre cambiante, tratándose de adaptar a las circunstacias y a las contingencias. Lo cierto es que el conflicto es parte de la sociedad y la cultura y con lo que hay que lidiar es con el grado de estabilidad o de conflicto que privan en la sociedad.

Horton, Paul y Hunt, Chester. SOCIOLOGIA, México, ed, McGraw-Hill, 6a. ed. 2006.

viernes, 1 de febrero de 2013

Los medios en la relación actor/acción y entorno

En el sistema de la acción social, desde un punto de vista sistémico funcional, la relación entre el autor y su acción, y el entorno, debe cumplir con variso fines, estrechamente vinculados, la autopoiésis (autoconstrucción) y la satisfacción de necesidades en el más amplio sentido de la palabra (morale, intelectuales, emocionales, afectivas, culturales, biológicas, materiales).
Para que stos fines se cumplan, dos tipos de medios entran en juego en la relación: lo medios de supervivencia que permiten la sobrevivencia del actor y que tienen que ver con su salud y nutrición (comer, beber, respirrar, eliminar) y;los medios de acción que el actor debe allegarse con el fin de que su acción social satisfaga sus necesidades. No son medios que pertenezcan al organismo biológico en cuanto tal o a la empresa u organización, sino medios que deben ser tomados del entorno circundante. Tal es el caso de los instrumentos, herramientas, maquinaria, medios de transporte o comunicación que ayudan al ser humano o a la organiación a cumplir sus fines y tareas, sean estas de carácter económico, político, cultural, familiar, etc. Ambos tipos de medios son muy importantes pero diferentes en su finalidad, y en órden de prioridad, los medios de supervivencia ocupan el lugar primorial sobre los medios de acción.  Sin la satisfacción de las necesidades de carácter biológico que tienen que ver con la nutrición y la salud del cuerpo, las necesiades de índole social, político, económico y cultural se vuelven más difíciles de cumplir y a veces hasta imposibles.  Estando satisfechas estas, es posible tratar de ir por las segundas con un buen grado de esperanza de que se cumplirán también.
La mediación entre el actor/acción y el enorno (contexto) es pues muy compleja y especialmente importante en la tarea analítica del investigador. No basta saber la nececidad del actor y su deseo de satisfacerla, tampoco basta saber las acciones que toma en ese sentido, sino también los medios que tiene a su disposición o debe conseguir, para llevarlas a cabo. Tener todos esos datos es parte de la labor de investigación y evaluación.